LA PUERTA ANCHA Y EL CAMINO ANCHO -
UNA NUEVA ENSEÑANZA DEL DR. LIN

Por favor voltea a Mateo 7:13-14 (p. 964 Scofield). Por favor, párese mientras yo lo leo.

“Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan” (Mateo 7:13-14).

Usted puede estar sentado.

Dr. Timothy Lin dijo, “Hace años, en Shanghái, se usaba ampliamente en China un cartel titulado ‘Vías anchas y estrechas.’ Mostraba un camino angosto que conducía a una hermosa ciudad dorada, y un camino ancho que conducía a un horrible lago de fuego. Pero este cartel se basó en una interpretación descuidada de la Biblia. Cada ‘vosotros’ requiere una lectura cuidadosa de Mateo 5, 6 y 7.” Una vez más, el Dr. Lin dijo, “¿Por qué debería Dios permitir que los Cristianos gobiernen Su reino eterno? Él no la hará. Los Cristianos desobedientes serán excluidos del reino eterno con las palabras, ‘Apártate de mí, nunca autoricé ni reconocí tus obras.’”

¡Confiar en Jesús requiere que la gente se arrepienta y confíe en Él! Pero al predicar durante años en el centro de la ciudad, yo descubrí que muchas personas no son creyentes. Vienen a Cristo con trucos. Por lo tanto, copiaron el testimonio de otra persona y no tienen un testimonio real. Una lectura cuidadosa del testimonio de John Cagan y el testimonio de Emi Zabalaga muestra que ella copió el testimonio de John. Ella era la pianista de nuestra iglesia, pero dejó nuestra iglesia unos días antes de Navidad, dejándonos sin pianista. Ella también dejó nuestra iglesia poco después de ser bautizada. Tales personas pueden engañar a los pastores, pero no pueden engañar a Dios.

“Porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan” (Mateo 7:14; p. 964).

Hay muchos predicadores “destacados” que han desperdiciado sus vidas al no caminar por el camino estrecho – hombres como Jimmy Swaggart, Jack Hyles. Ravi Zacharias y muchos más. Jerry Falwell, Jr. se fue con una herencia de 10 millones de dólares de su padre, Jerry Senior, pero este hombre (Jerry Jr.) vivía de la manera “amplia” que lleva a una vida desperdiciada. Esta es la forma amplia en la que Kreighton y Waldrip caminan hoy.

Jonathan Cahn escribió un libro llamado The Harbinger, [El Heraldo]. Yo leí todo el libro la semana pasada. ¡Es basura! These are the Generations, [Estas Son Las Generaciones] es un libro mucho mejor. Lea el libro del Dr. Branson, Church Split, [Quebrantamiento de Iglesia].

Asegúrese de leer los primeros siete capítulos de Mateo varias veces. Asegúrate de haber entrado por la puerta estrecha. Asegúrate de vivir en el camino angosto.

Asegúrese de vivir tu vida para Dios. Entonces Jesús podrá decirte a ti,

“BIEN, BUEN SIERVO Y FIEL…ENTRA EN EL GOZO DE TU SEÑOR” (Mateo 25:21; p. 995).

Memorícelo – y hágalo.

Ponte de pie y canta nuestro himno de nuevo.

Al andar con Jesús, con sus dichos de luz,
     Nuestra senda será Emmanuel.
Al cumplir su desear, Él nos va acompañar,
     Por lo tanto confiad y sed fiel.
Confiad en Él y también sedle fiel,
     Si queréis ser felices, confiad y sedle fiel.

Toda sombra fugaz, toda nube voraz,
     Con su risa se convierte en miel,
Lloros ahuyentaras, dudas no temerás
     Ven entonces confiad y sed fiel.
Confiad en Él y también sedle fiel,
     Si queréis ser felices, confiad y sedle fiel,

Oh guan gran comunión,
     Al llegar hasta Sion andaremos unidos con Él,
Lo que diga se hará, lo que indique será,
     No temáis más confiad y sed fiel.
Confiad en Él y también sedle fiel,
     Si queréis ser felices, confiad y sedle fiel.
(“Trust and Obey” [“Confiad Y Sed Fiel”] por John H. Sammis, 1846-1919,
estrofas 1, 2 and 4).

Creer Requiere Obediencia

por Dr. A. W. Tozer

Es fácil ser ortodoxo en asuntos que están lejos de nosotros, que no tienen relación inmediata con nuestras vidas. Otra cosa muy distinta es ser ortodoxos en asuntos que nos conciernen íntimamente, que “vuelven a casa, a nuestros negocios y nuestro pecho.”

Un hombre puede, por ejemplo, creer en el relato Mosaico de la creación, las historias del diluvio y de la orden de Josué al sol que se detenga y no experimente ninguna dificultad. Porque, después de todo, él no es ni mejor ni peor por creer esas cosas. No le imponen exigencias morales. Puede creerlas implícitamente sin alterar su vida.

Puede continuar aceptando todo el registro de la vida y obra de Cristo tal como se da en el Nuevo Testamento. Puede recibir sin cuestionar todas las doctrinas enseñadas por su iglesia y, sin embargo, ser exactamente el mismo hombre que era antes, siendo la única pequeña diferencia un pequeño aumento en la cantidad de su mobiliario mental.

Recibir la verdad no es suficiente. El hombre que quiera conocer el poder de la fe Cristiana debe someterse y obedecer. Cuando nuestra fe se vuelve obediente [a Dios], las poderosas energías de la gracia comienzan a operar.

Siempre corremos el peligro de sustituir la enseñanza por la vida. El adoctrinamiento no es regeneración y nunca debe confundirse con el. Cada año, miles de personas salen de las clases de confirmación que nunca han conocido el poder transformador del evangelio. Estos resultan ser [hipócritas] de toda la vida, ortodoxos en su credo, pero paganos intactos de hecho. Han absorbido la noción de que recibir el credo acerca de Cristo es idéntico a recibir a Cristo. Este es un error costoso y trágico.

Hay una forma segura de escapar de los engaños de la religión: Recibe a Cristo como Señor de nuestras vidas y comenzar a obedecerle a Él en todo. Sométete a la verdad y deja que nos investigue. Someterse y obedecer son palabras duras y exigentes, pero necesarias si queremos ser verdaderos Cristianos.

Pero en realidad no hay nada aterrador en las demandas de Cristo. “Porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga” (Mateo 11:30), Él dijo a sus discípulos, y una gran multitud podría levantarse hoy y decir, “Así lo hemos encontrado.”

(Dr. A. W. Tozer, “Believing Requires Obedience,” [“Creer Requiere Obediencia”], en The Early Tozer: A Word in Season, [Tozer en el Principio: Una Palabra En Temporada] pp. 75-76).