Estoy tomando como nuestro texto algunas palabras por el medio del versículo, “Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco.” Puede pasar por alto esas palabras cuando las encuentre en la Biblia. El versículo no habla de la muerte de Cristo ni de Su resurrección. No es parte del Sermón de el Monte. No da el Padre Nuestro. Pero ahí está en la Biblia, y nunca es prudente ignorar la Palabra de Dios. Este versículo es tanto la Palabra de Dios como Juan 3:16. Debido a que es la Palabra de Dios, es viva y poderosa (mira Hebreos 4:12). Esta tarde quiero dar respuesta a cuatro preguntas de nuestro texto.

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I. Primero, Cristo dijo esto.

“Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco” (Marcos 6:31).

¿Quién les dijo a los Discípulos que se fueran al desierto y descansaran? ¿Fue Thomas el que dudo? ¿Fue Judas el traidor? ¿Fue Pedro, el hombre que negaría a Cristo? No, fue Jesús Él mismo. Versículo 30 dice, “Entonces los apóstoles se juntaron con Jesús, y le contaron todo lo que habían hecho, y lo que habían enseñado” (Marcos 6:30). Luego el versículo 31 dice, “Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco” (Marcos 6:31).

Tú puedes pensar, “Eso no me suena como Jesús. ¿No habló de sufrimiento y dolor?” Es cierto que Jesús dijo, “Es necesario que el Hijo del Hombre padezca muchas cosas, y sea desechado por los ancianos, por los principales sacerdotes y por los escribas, y que sea muerto, y resucite al tercer día.” (Lucas 9:22; p. 1044). Y en el siguiente verso dijo, “Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame.” (Lucas 9:23).

Jesús habló de sufrimiento y abnegación, por Él mismo y por todos los que lo siguen. Así que puede parecerles extraño que Cristo les dijera a sus discípulos que descansaran – pero lo hizo. Jesús, el Hijo de Dios, habló del descanso con tanta seguridad como habló de su propia muerte.

Cristo no era como un músico que toca una sola nota. El mismo Jesús que le dijo a Pedro, “¡Quítate de delante de mí, Satanás!” (Mateo 16:23; p. 982) también le dijo a Pedro, “Paz a vosotros” (Juan 20:21; p. 1099). Cristo era como Su Padre. La Biblia dice, “Nuestro Dios es fuego consumidor” (Hebreos 12:29; p. 1260) y dice, “Dios es amor.” (I Juan 4:8; p. 1280). Él era completamente hombre, como tú, solo sin pecado. Tú tienes un Dios pleno y completo. Tú tienes un Cristo lleno y completo, un hombre de toda seriedad y un hombre de toda amabilidad. Jesús habló ambos en reprender y en amor. Él era completamente hombre, como tú, solo sin pecado. Jesús comió comida como tú. Él se cansó y durmió como tú. Y dijo a sus discípulos, “Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco” (Marcos 6:31). Hoy, la Palabra de Dios dice lo mismo a nuestra iglesia y a ti. Aparte y descansad.

II. Segundo, ¿qué es lo que Cristo les dijo que hicieran?

Jesús les dijo, “Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco” (Marcos 6:31). Ese día no les dijo, “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura” (Marcos 16:15; p. 1028). Habría tiempo para eso más tarde. En cambio, Él les dijo, “Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco.” Puede pensar, “¿Eso es todo?” ¿No estaban perdiendo el tiempo? ¿No deberían estar haciendo algo? Pero ellos estaban haciendo algo. Iban solos al desierto y descansaban. Eso es tan importante como cualquier otra cosa.

Dios no es un manda-esclavos. Él sabe que tú necesitas descansar. Él sabe que tú necesitas comer y dormir. Cuando Elías se escondió de los hombres de Jezabel, Dios envió un ángel y le dio comida y agua (mira I Reyes 19:1-7; p. 383). El título de Scofield al comienzo de ese capítulo lo dice bien, “El cuidado cariñoso de Dios para su cansado profeta.” La palabra “sobreexcitado” significa “ansioso, emocionado, preocupado, nervioso, tenso, al borde.” ¿Alguna vez te has sentido así? Recuerde que Dios se preocupa por ti como lo hizo con Elías.

Jesús es como su Padre. Él también se preocupa por ti. Él no es un asalariado quien “no le importan las ovejas” y “huye” (Juan 10:13; p. 1085). Él no es como Chan que se fue, pensando solo en sí mismo y luego atacó como un lobo para matar y destruir (Juan 10:10). Jesús se preocupa por Sus ovejas. Él se preocupa por ti. Él es el Buen Pastor que da Su vida por las ovejas (Juan 10:15). Jesús se preocupa por ti. Por eso Él quiere que descanses. Y esto me lleva al siguiente punto.

III. Tercero, ¿por qué piensas que Cristo les dijo esto?

“Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco” (Marcos 6:31).

Puede pensar que Cristo les dijo que hicieran esto para que pudieran orar y ayunar. Pero el versículo nunca nos dice eso. No menciona la oración ni el ayuno. Puedes pensar que Cristo les dijo a los Discípulos que se fueran al desierto para escapar del pecado del mundo. Pero el versículo no nos dice eso. No menciona el mundo ni su pecado. La respuesta está en las palabras del texto mismo: Cristo les dijo que descansaran.

Como dijo el maestro Bíblico de radio, el Dr. J. Vernon McGee, “Es imposible para nosotros entender cuán ocupado estaba el Señor Jesús y cuán grandes eran las demandas sobre Él. Tuvo que retirarse a un lugar deshabitado en un intento por descansar y dejar descansar a sus apóstoles” (Thru the Bible, volume 4, p. 186; note on Mark 6:30-31 [A Través De La Biblia, volumen 4, p. 186; nota sobre Marcos 6:30-31]).

Nuestro texto dice, “eran muchos los que iban y venían, de manera que ni aun tenían tiempo para comer” (Marcos 6:31). Había muchas cosas sucediendo. Cristo y sus discípulos ni siquiera tuvieron tiempo para comer. Necesitaban descansar. Preguntas, “¿Incluso Jesús?” Sí, porque Él era humano, como nosotros en todos los sentidos excepto en el pecado. La Biblia dice, “Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades [falta], sino uno que fue tentado [probado] en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado” (Hebreos 4:15; p. 1250). Jesús tuvo hambre. Necesitaba comer. Jesús se cansó. Necesitaba descansar.

Siempre hay algo que hacer. Has tenido muchas ocasiones en las que has trabajó duro. La gente iba y venía. Pasó una cosa tras otra. Eso está bien. La vida Cristiana es una vida de trabajo. Pero también hay tiempo para descansar, como descansaron Jesús y sus discípulos.

Hay cosas que aprender y hacer que no se pueden aprender y hacer en medio de la actividad. Tú no puedes aprender a orar donde todo el mundo va y viene, hablando y gritando, mientras corre de aquí para allá. Debes estar separado, solo con Dios, meditando en Su Palabra, llevándole tus oraciones a Él, entrar en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo (mira Hebreos 10:19; p. 1256). Estar con Dios es como ninguna otra actividad. Es mucho mejor. Mientras, “la cual, sentándose a los pies de Jesús, oía su palabra” (Lucas 10:39; p. 1047), y la hermana Marta se “preocupaba con muchos quehaceres” (Lucas 10:40). Cristo dijo, “María ha escogido la buena parte” (Lucas 10:42). Siempre hay tiempo para “servir mucho.” Pero solo al separarte con Jesús puedes tener “esa buena parte,” la mejor parte.

Ahora tienes más tiempo para la mejor parte. Tienes tiempo para pensar de la Palabra de Dios. Tienes tiempo para orar. Me da alegra que Dr. Hymers nos haya enseñado de la oración. Piense en lo que dice y aprenda de eso. Ahora es el tiempo de orar. Ahora es el momento de conocer mejor a Dios. Esto es un regalo de Dios. Como dijo Jesús, “Venid vosotros aparte…y descansad un poco.”

Había otra razón por la que era hora de aparte y descansar. Los Discípulos acababan de enterarse de la decapitación de Juan el Bautista. El rey Herodes hizo que cortaran la cabeza a Juan (Marcos 6:27). La Biblia dice, “llegaron sus discípulos [de Juan], y tomaron el cuerpo y lo enterraron; y fueron y dieron las nuevas a Jesús” (Mateo 14:12). Si los Apóstoles no sabían antes de la muerte de Juan, ciertamente lo sabían entonces. Esto les causó gran dolor. Fue Juan quien había bautizado a muchos de ellos. Fue Juan quien dirigió a sus discípulos a Jesús, “He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo” (Juan 1:29; p. 1072). Esto fue terrible noticia. No es de extrañar que Jesús les dijo. “Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco” (Marcos 6:31). Necesitaban hacer eso. Esa es otra razón por la que Cristo les dijo que se apartaran y descansaran.

IV. Cuarto, ¿por cuánto tiempo Cristo les dijo que hicieran esto?

Cristo dijo, “Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco” (Marcos 6:31). ¿Cuánto tiempo descansaron? La Biblia no nos lo dice. Solo dice, “un poco.” ¿Cuánto tiempo es un poco? ¡El tiempo que es necesario!

Y así es con ti. Tienes tiempos de descanso de distinta duración. En el trabajo tienes un descanso de unos minutos por la mañana y de nuevo por la tarde. Una vez al año te tomas vacaciones y descansas más tiempo. No sabemos cuánto tiempo descansaron los Apóstoles. Era todo el tiempo que necesitaban, porque Cristo el Buen Pastor los estaba cuidando. Él sabía lo que ellos necesitaban. Y Jesús te dará todo el descanso que necesites.

La Aplicación

“Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco” (Marcos 6:31).

En nuestra iglesia hemos estado descansando. De una manera, el coronavirus nos ha impuesto esto. No podemos evangelizar en las escuelas, porque están cerradas. El gobernador pagano de California nos obliga a usar máscaras. Otros también usan máscaras. Están asustados, mucho más asustados de lo necesario. No quieren ir a un lugar con gente que no conocen. Y así descansamos.

Hay otra razón por la que estás descansando. Dios te ha dado este descanso. Los Discípulos estaban tristes cuando mataron a Juan el Bautista. Tú también has sufrido a través de malas noticias. Has pasado por un quebrantamiento de iglesia dirigida por Chan y Waldrip. Ellos te han causado dolor. Nosotros estamos aquí y sobreviviremos y creceremos. Pero has tenido dolor. Ahora es el momento de descansar. Dios te ha dado este descanso. El cuido por Elías, el profeta de Él. Y Cristo también cuida por ti, porque Él es el Buen Pastor. Tómate este tiempo para descansar.

Hay un momento para todo. La Biblia dice, “Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.” (Eclesiastés 3:1; p. 672). Hay un momento para ayunar y un momento para comer. Hay un tiempo para trabajar y un tiempo para descansar. Esto es un momento de descanso.

Este es un momento para que aprenda sobre la oración – y para orar. Escuche los mensajes que ha dado Dr. Hymers. Ellos son como el oro. Piense en las lecciones y has lo que dicen. Dios Él mismo es el mayor tesoro de todos. Toma tiempo para Él. Ora a Él. Acércate a Él. En el tiempo que antes estabas ocupado, toma tiempo para orar.

El descanso y la tranquilidad separados es tan importante como el trabajo, e incluso más importante. Dios dijo, “Seis días trabajarás, y harás toda tu obra; mas el séptimo día es reposo para Jehová tu Dios; no hagas en él obra alguna” (Éxodo 20:9, 10; p. 91). En la era de la iglesia, el Día del Señor es el día en que Jesús resucitó de entre los muertos – el Domingo. Ese día no es para nuestro trabajo en el mundo. Está apartado para Dios. Es el día más importante de la semana, no menos importante.

Pero Jesús dijo más sobre ese día. Jesús dijo, “El día de reposo fue hecho por causa del hombre, y no el hombre por causa del día de reposo” (Marcos 2:27; p. 1008). Jesús sabía que el día especial estaba hecho para nosotros. Fue hecho para darnos tiempo para descansar y estar con Dios. Usa ese día de descanso para Dios, para descansar tu cuerpo y alma y acercarte a Él. Obtenga el descanso que necesita.

No somos Sabadistas, pero estamos de acuerdo con el pastor Buckley de Phoenix, Arizona, quien dijo,

“Cuando confiamos en Dios y descansamos, Él puede darnos conocimientos y comprensión que nos harán más fructíferos a largo plazo de lo que sería si trabajáramos los siete días de la semana. La conclusión es que Dios ha hecho el sábado para el hombre porque lo necesitamos. No estoy abogando por el legalismo espiritual. Te animo a que dediques un tiempo a descansar para que puedas estar sano. Dios recompensa nuestra obediencia y, finalmente, las verdades de las Escrituras se revelan a quienes las obedecen” (pp. 209-210 of From Darkness Into Light: My Journey by Mark Buckley, published by www.markbuckleyministries.com; Mark Buckley Ministries, 7000 N. Central Avenue, Phoenix, Arizona 85020 [págs. 209-210 De Oscuridad a la Luz: Mi Jornada de Mark Buckley, publicado por www.markbuckleyministries.com; Mark Buckley Ministries, 7000 N. Central Avenue, Phoenix, Arizona 85020]).

Después de descansar, Cristo volvió a trabajar. Enseñó a mucha gente y alimentó a los cinco mil (mira Maros 6:34-44). Llegará un tiempo para que trabajes. Pero la Biblia dice, “Para todo hay un tiempo.” Este es un tiempo para descansar. Descanse y recoge fuerza. Sal del descansado. Acércate más a Dios en oración. ¡Sal un mejor Cristiano! Amén.