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LA LUCHA DE LA CONVERSIÓN

por Dr. R. L. Hymers, Jr.

Un sermón predicado en el Tabernáculo Bautista de of Los Angeles
La Mañana del Día del Señor, 22 de Febrero de 2009

“Esforzaos a entrar por la puerta angosta” (Lucas 13:24).


Mucha gente creía que Jesús era un profeta. También creían que El podia obrar milagros. Pero muy pocos de ellos se arrepintieron y fueron convertidos. Ellos estaban satisfechos consigo mismos del modo en que estaban. Pero Jesús dijo:

“Si no os arrepentís, todos perecereís igualmente” (Lucas 13:5).

La palabra Griega traducida “arrepentís” significa tener una nueva mente. Significa ser convertido. Y Cristo les dijo que tenían que experimentar eso o si no “perecerían.” Eso les sorprendió. Ellos pensaban que eran buenos lo suficiente del modo en que estaban.

Cristo iba camino a Jerusalén. Alguien notó que solamente pocos realmente lo estaban siguiendo. Esta persona le dijo a El, “¿son pocos los que se salvan?” Jesús no le contestó la pregunta. En vez, Cristo le habló directamente. El le dijo,

“Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán” (Lucas 13:24).

El le dijo a aquel hombre que tenía que “esforzase a entrar por la puerta angosta.” Y El te dice lo mismo a ti esta mañana. “Esforzaos a entrar por la puerta angosta.” ¿Que significa eso? ¿Qué es lo que Cristo te está diciendo que hagas? Tienes que entender tres palabras en el texto.

I. Primero, las dos palabras “puerta angosta.”

Jesús dijo, “Esforzaos a entrar por la puerta angosta.” La palabra Griega traducida “angosta” es “stĕnŏs.” Significa “angosta” (Strong). La palabra Griega traducida “puerta” es “pulē.” Significa “puerta…entrada” (Strong). Así, Jesús dijo, “Esforzaos a entrar por la ‘entrada angosta’.” Aquellas mismas palabras son usadas por Jesús en Mateo 7:

“Entrad por la puerta [entrada] estrecha…Porque estrecha [angosta] es la puerta…y pocos son los que la hallan”
      (Mateo 7:13, 14).

La “entrada angosta” lleva a “la vida” (Mateo 7:14). El Dr. Gill dijo, “Con la puerta angosta se quiere decir Cristo mismo; que en otras partes se llama a sí mismo la puerta…sí, él es la puerta del cielo” (traducción de John Gill, D.D., An Exposition of the New Testament, The Baptist Standard Bearer, edición de 1989, p. 70; nota de Mateo 7:13).

Jesús dijo, “Esforzaos a entrar por la puerta estrecha.” O sea, esforzarse a entrar a Cristo. ¿Por qué es Cristo llamado “la puerta angosta”? Porque Cristo es la única puerta a la salvación. La gente en el mundo hoy dice, “Ustedes los Cristianos son tan estrechos. ¿Por qué no puede la gente ser salva de otra manera? ¿Por qué ustedes dicen que Cristo es el único camino?” Nuestra respuesta es que Cristo Mismo dijo que El es “la puerta angosta.” El dijo,

“Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí” (Juan 14:6).

El Dr. Gill dijo,

Cristo es el camino verdadero a la vida eterna…Cristo es el único camino de acceso al Padre; no hay venir a Dios…sin un mediador, y el único mediador entre Dios y el hombre es Cristo (ibid.).

La Biblia dice,

“Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, el cual se dio a sí mismo en rescate por todos” (I Timoteo 2:5-6).

Dios “ha dado a su hijo unigénito” (Juan 3:16) para morir en la Cruz, y derramar Su Sangre, para que el hombre pudiera ser “rescatado” del pecado y de la muerte. Dios envió a Su Hijo unigénito a sangrar y morir en la Cruz,

“para que el mundo sea salvo por él” (Juan 3:17).

Ningún otro líder religioso ni maestro era “el unigénito Hijo de Dios.” Ningún otro líder o maestro religioso era el “solo mediador entre Dios y los hombres.” “Jesucristo hombre” es el único

“Quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero”…en la Cruz (I Pedro 2:24).

Es por eso que el Apóstol Pedro dijo,

“Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos” (Hechos 4:12).

“Esforzaos a entrar por la puerta angosta” (Lucas 13:24).

Jesús es la puerta angosta. Cristo es la puerta estrecha a la salvación. Tú tienes que venir a El, porque solamente El te puede salvar.

II. Segundo, la palabra “esforzaos.”

Jesús dijo,

Esforzaos a entrar por la puerta angosta” (Lucas 13:24).

La palabra “esforzaos” viene al Español de la palabra Griega “agōnizomai.” Significa “laborar con fervor…batallar” (Vine), “luchar” (Strong). “Agōnizomai” viene de la palabra raíz “agōn.” Significa “esfuerzo, ansiedad, conflicto” (Strong). Cuando Jesús dijo, “Esforzaos a entrar,” El quiso decir que tú tienes que batallar para entrar, pelear para entrar, con “esfuerzo, ansiedad y conflicto.” Una forma de esta palabra Griega fue usada por Lucas para describir la agonía de Cristo en el Huerto de Getsemaní, la noche antes de ser crucificado.

“Y estando en agonía, oraba más intensamente; y era su sudor como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra”
      (Lucas 22:44).

Jesús tuvo que pasar grande agonía, batallando en oración, o El se hubiera muerto en el Huerto bajo el peso de tu pecado. Si el Hijo de Dios tuvo que pasar tal conflicto de agonía y batallar para salvarte, ¿no parece lógico y Bíblico que tú tengas que pasar algo de eso para “entrar por la puerta angosta”? Es por eso que Jesús dijo, “Esforzaos a entrar por la puerta angosta.”

Todos los grandes predicadores Protestantes del pasado atravesaron grandes “luchas” cuando fueron convertidos. Lutero estuvo en agonía por meses antes de “entrar” en Cristo. John Bunyan estuvo a punto de perder la cabeza antes de hallar paz en Cristo. John Wesley viajó ida y vuelta atravesando el Océano Atlántico en locura de duda propia y miseria, batallando para “entrar por la puerta angosta.” George Whitefield casi murió de hambre ayunándo y en oración, batallando para entrar en Cristo. Spurgeon a los diecisiete años de edad, siendo hijo de un pastor, peleó con todas sus fuerzas para hallar a Cristo. Las conversiones de todos estos predicadores famosos incluyeron gran esfuerzo, ansiedad y conflicto, mientras peleaban su camino a Jesús. ¿Por qué debe ser diferente para tí? Jesús dijo,

“Esforzaos a entrar por la puerta angosta” (Lucas 13:24).

Un viejo himno dice:

¡Pelea la buena batalla con toda tu fuerza!
   Agarra la vida, y será
Tu gozo y tu corona eternamente.
   (“Fight the Good Fight With All Thy Might”
      por John S. B. Monsell, 1811-1875).

Esa es la manera en que ocurren las verdaderas conversiones. Escucha uno de los himnos más populares jamás escritos – “Tal Como Soy” por Charlotte Elliott (1789-1871). Ella sabía exáctamente lo que significaba esforzarse, en conflicto y lucha, para hallar a Cristo.

Tal como soy, aunque esté arrojado
   Con muchos conflictos, muchas dudas,
Batallas y temores por dentro, por fuera,
   Oh, Cordero de Dios, ¡yo vengo! ¡yo vengo!
(“Just As I Am” por Charlotte Elliott, 1789-1871).

“Esforzaos a entrar por la puerta angosta” (Lucas 13:24).

(FIN DEL SERMON)
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La Escritura Leída por Dr. Kreighton L. Chan Antes del Sermón: Luke 13:5, 22-24.
El Solo Cantado por el Sr. Christopher J. Bebout Antes del Sermón:
“Just As I Am” (por Charlotte Elliott, 1789-1871).


EL BOSQUEJO DE

LA LUCHA DE LA CONVERSIÓN

por Dr. R. L. Hymers, Jr.

“Esforzaos a entrar por la puerta angosta” (Lucas 13:24).

(Lucas 13:5)

I.   Primero, las dos palabras “puerta angosta,” Mateo 7:13, 14;
Juan 14:6; I Timoteo 2:5-6; Juan 3:16, 17; I Pedro 2:24;
Hechos 4:12.

II.  Segundo, la palabra “esforzaos,” Lucas 22:44.