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Cuando le escribas a Dr. Hymers, siempre dile en qué país vives o él no te podrá contestar. El correo electrónico de Dr. Hymers es rlhymersjr@sbcglobal.net.

Los Angeles Times publicó recientemente un artículo que indica que muchos jóvenes están tomando más en serio la religión hoy en día. El artículo dijo:

Puede haber una corriente social en marcha, ya que una proporción mayor de adolescentes de hace una década dijo que la religión es importante...Están aumentando la inscripción en las universidades Cristianas a un ritmo tres veces mayor al de otras escuelas que otorgan títulos. La religión es cada vez más grande en la vida de los adolescentes...(traducción de The Los Angeles Times, Marzo 29, 2004, pág. E-11).

Esta tendencia también está ocurriendo en las universidades seculares, donde los estudiantes son a menudo más conservadores religiosamente que sus maestros de generación Hippie. Muchos jóvenes ahora están más interesados en Dios que los ideales radicales izquierdistas de sus profesores.

¿Cuál es la causa de esta nueva tendencia? Creo que muchos jóvenes de hoy han visto que los ideales sociales de la izquierda radical no han ayudado a nuestro país. Creo que esta nueva generación de jóvenes busca estabilidad, amistades duraderas y buscan el sentido de la vida. Estos intereses están llevando a muchos de ellos a reexaminar las enseñanzas de la Biblia, en particular, la vida y las enseñanzas de Jesucristo.

Una de las fuerzas impulsoras detrás de este nuevo interés en Dios es la soledad que tantos jóvenes experimentan hoy. La mayoría de los jóvenes de la escuela secundaria y de edad universitaria sienten una dolorosa soledad en su interior. Una persona joven expresó esos sentimientos de soledad al decir:

Quiero ser especial con alguien, pero no hay nadie que se preocupe por mí. No puedo recordar a nadie tocándome, sonriéndome o deseando estar conmigo...Estoy tan solo que apenas puedo soportarlo (citado por Josh McDowell, The Disconnected Generation, Word, 2000, p. 11).

Esa persona joven experimentó el dolor de la soledad de la que habló el Salmista cuando dijo:

“Soy semejante al pelícano del desierto; Soy como el búho de las soledades; Velo, y soy Como el pájaro solitario sobre el tejado” (Salmo 102:6-7).

Nuestro grupo de edad se llama la “Generación del Milenio”. Muchos de nuestra generación se sienten totalmente aislados y solos en la sociedad estadounidense – solos y aislados de relaciones significativas, en un mundo sin amor y sin amistades duraderas. ¿Alguna vez tú te has sentido solo? Pensemos en eso.

I. Primero, piensa sobre las causas de la soledad.

Adán estaba solo en el Huerto del Edén. Era un lugar perfecto para vivir. Todo fue provisto para él. Sin embargo, estaba solo. Muchos jóvenes hoy tienen grandes ventajas – un televisor, un automóvil, dinero y su propia computadora. Sin embargo, están solos. Su padre se ha ido o está demasiado preocupado para pasar tiempo con ellos. Su madre está trabajando. Si tienen hermanos y hermanas, la mayor parte del tiempo se van.

Puedes conectarte a la computadora y chatear con personas, pero hay algo que falta en eso. De alguna manera, no es lo mismo que hablar con personas reales. Después de pasar cientos de horas jugando juegos de video – solo – sientes que tiene que haber algo más. A veces no piensas “¿Eso es todo lo que hay en la vida”?

Cuando Dios vio que Adán estaba solo en el Huerto dijo:

“No es bueno que el hombre esté solo” (Génesis 2:18).

No era bueno para Adán estar solo. Y tampoco es bueno para ti.

Un joven fue a ver a sus padres en otro país. Gastó una gran cantidad de dinero para hacer el largo viaje para verlos. Pero su madre se fue de repente en un viaje de negocios no anunciado justo antes de su llegada. Y su padre pasó la mayor parte del tiempo escondido en su habitación jugando juegos en su computadora. Mi amigo se quedó solo en la casa. El abandono y la soledad que sintió en la casa de sus padres es una experiencia común entre los jóvenes de hoy.

Luego está el problema de moverse y cambiar constantemente. Muchos de tus padres se mudan cada pocos años – siempre, parece, para ganar más dinero o para obtener alguna otra ventaja. Nuestro pastor, Dr. Hymers, sabe cómo se siente eso. De hecho, fue a veintiocho escuelas diferentes antes de graduarse de la escuela secundaria. Recuerda cómo se sentía ser siempre el “niño nuevo” en su clase. Él siempre se sintió como un extraño. ¡Con qué razón! Él siempre fue el “niño nuevo”.

¿Alguna vez te has sentido así? Luego, cuando te gradúas de la escuela secundaria, te hablan de enviarte a una universidad lejos. Justo en el momento en que necesitas más estabilidad que nunca, te hacen pasar por este horrible “rito de iniciación”. Te envían “lejos” a una escuela distante, y el dolor de la soledad suele ser insoportable, especialmente durante el primer semestre. Creo que esa es una de las razones por las que el suicidio es la segunda causa de muerte entre los jóvenes, siguiendo de cerca los accidentes automovilísticos. Muchos de los que se suicidan simplemente no pueden soportar la soledad por más tiempo. Pero el suicidio no es la respuesta a la soledad. Tienes un alma eterna, y estarás aún más solo en el Infierno.

Jesús habló de un hombre rico que murió y se fue al Infierno.

“Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos” (Lucas 16:23).

Jesús describió a este hombre como alguien tan solitario en el Infierno que no había nadie allí para darle un trago de agua para refrescar su lengua (Lucas 16:24). Te advierto que el suicidio no es la respuesta a tu depresión y soledad.

II. Segundo, piensa sobre las curas de la soledad.

Cuando Dios vio la soledad de Adán, dijo:

“No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él” (Génesis 2:18).

Dios puso a Adán a dormir y tomó una de sus costillas, fuera de su costado,

“Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre” (Génesis 2:22).

La Biblia Anotada de Scofield tiene una nota sobre Génesis 2:23 que dice: “Eva, tipo de la Iglesia como la esposa de Cristo”.

Dios llevó a Eva fuera del costado de Adán para que fuera su esposa y su ayudante. Y Dios sacó a la Iglesia del lado herido de Jesús para ser Su esposa y para ser tu ayuda. Eva fue sacada del lado de Adán para ser su ayuda, para que no estuviera solo. La Iglesia fue sacada del costado de Jesús, herido por una lanza cuando estaba en la Cruz, para que la Iglesia local pudiera ayudarte a vencer la soledad.

Dios quería que Eva fuera la ayuda de Adán. Y Dios quiere que la iglesia sea tu ayuda. Adán debe haberse regocijado de felicidad al descubrir que tenía una amiga y compañera para su viaje por la vida. Y tú te regocijarás y encontrarás la felicidad a través de amigos y compañeros duraderos que hagas en esta iglesia local. La iglesia siempre estará aquí para ti. Así fue en la iglesia local de Jerusalén.

“Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón” (Hechos 2:46).

Hay una gran alegría y felicidad al unirnos al compañerismo de una iglesia local. La participación en una iglesia como esta es la cura dada por Dios para la soledad. Es por eso que decimos repetidamente: “¿Por qué estar solo? ¡Ven a casa – a la iglesia! ¿Por qué estar perdido? ¡Ven a casa – a Jesucristo, el Hijo de Dios!”

Te graduarás de la escuela secundaria. Te graduarás de la universidad. Los amigos que hagas allí se graduarán también. Poco a poco, perderás contacto con ellos – y estarás solo de nuevo. Pero nunca te “gradúas” de la iglesia local. Incluso cuando mueres, eres trasladado a

“la congregación de los primogénitos que están inscritos en los cielos” (Hebreos 12:23).

Es por eso que cantamos,

A la tierra prometida voy,
A la tierra prometida;
¿Oh, quien vendrá conmigo irá?
A la tierra prometida voy.
   (Traducción libre de “On Jordan’s Stormy Banks”
      por Samuel Stennett, 1727-1795).

Al llegar al cielo, ¡Oh, qué día tan gozoso será!
Cuando a Jesús vea, ¡Qué gran victoria nos dará!
   (Traducción libre de “When We All Get to Heaven”
      por Eliza E. Hewitt, 1851-1920).

Veré amigos que tanto amé,
Como un río el gozo fluirá;
Pero, yo sé, la sonrisa de Él,
Será mi gloria por la eternidad.
Gloria será para mí ser,
Gloria será, Gloria será;
Cuando por gracia Su rostro he de ver,
Será la gloria, La gloria a mi ser.
   (Traducción libre de “O That Will Be Glory”
      por Charles H. Gabriel, 1856-1932).

Nuestro texto dice:

“Soy semejante al pelícano del desierto; Soy como el búho de las soledades; Velo, y soy Como el pájaro solitario sobre el tejado” (Salmo 102:6-7).

Spurgeon dijo, acerca de este versículo:

El Salmista se compara con...aves que se usan comúnmente como emblemas de tristeza y miseria...él se sentía ser como un pájaro melancólico [triste y solitario] sentado entre los palacios [en ruinas] (traducción libre de C. H. Spurgeon, The Treasury of David, Pilgrim Publications, 1983 reprint, volume IV, p. 420).

El Dr. Gill dijo:

Los Judíos tenían techos planos sobre sus casas, y aquí venían aves de soledad y se sentaban solos en las estaciones nocturnas, a quienes el Salmista se compara a sí mismo; siendo abandonado por sus amigos y conocidos; o, estando en circunstancias melancólicas [tristes y solitarias], él eligió estar solo, llorando su doloroso estado y condición (traducción de John Gill, D.D., An Exposition of the Old Testament, The Baptist Standard Bearer, 1989 reprint, volume IV, p. 127).

Puedes sentirte desamparado por amigos y conocidos. O puedes haber sido elegido a estar solo. De cualquier manera, si te sientes tan solo como un pájaro solitario en la azotea, ha llegado el momento de que hagas algo al respecto. ¡No te vayas solo, después de que este servicio haya terminado! La Biblia dice:

“No dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre” (Hebreos 10:25).

Jesús murió para pagar la pena por tus pecados en la Cruz. Jesús resucitó físicamente de entre los muertos y ascendió al Cielo, donde está sentado a la diestra de Dios – esperando que vengas a casa a Él para que pueda lavar tus pecados con Su Sangre, para que puedas comenzar una nueva y mejor vida con Él en la feliz comunión de esta iglesia local.

Esa es la razón por la que decimos: “¿Por qué estar solo? ¡Ven a casa – a la iglesia! ¿Por qué estar perdido? ¡Ven a casa – a Jesucristo, el Hijo de Dios!” Dr. Cagan, por favor venga y cierre este servicio.

(FIN DEL SERMÓN)
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El Solo Cantado por el Sr. Benjamin Kincaid Griffith Antes del Sermón:
“It Is No Secret” (por Stuart Hamblen, 1908-1989).