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DIOS ESTÁ CORRECTO Y TÚ ESTÁS EQUIVOCADO

por el Sr. John Samuel Cagan

Un sermón predicado en el Tabernáculo Bautista de Los Angeles
La Mañana del Día del Señor, Diciembre 11, 2016

“Él es la Roca, cuya obra es perfecta, Porque todos sus caminos son rectitud; Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en él; Es justo y recto” (Deuteronomio 32:4).


Dios es un “Dios de verdad y sin ninguna iniquidad, Es justo y recto”. (Deuteronomio 32:4). En el Salmo 92:15 leemos: “En Él no hay injusticia”.

Hoy en día a menudo oímos a la gente decir: “No sería correcto que Dios enviara a nadie al infierno”. O: “No sería justo que la gente estuviera en el Infierno para siempre”. Estas personas acusan a Dios de estar equivocado y ser injusto por amenazar a los pecadores con condenación eterna. Pero ellos están equivocados y Dios está correcto, como yo lo mostraré.

La Biblia dice: “El Juez de toda la tierra, ¿no ha de hacer lo que es justo?” (Génesis 18:25). Y la respuesta a esa pregunta es “sí”. Dios siempre hace lo correcto, y nunca hace mal. Él es un “Dios de verdad y sin ninguna iniquidad, Es justo y recto”.

Puesto que Dios es justo y recto, debe ser correcto que Él te juzgue por tus pecados. Muchos teólogos han demostrado que somos profundamente pecadores. ¡Ellos mostraron que Dios está correcto y tú estás equivocado! Dios es un “Dios de verdad y sin ninguna iniquidad, Es justo y recto” (Deuteronomio 32:4). ¡Pero eres una persona llena de iniquidad, injusta y pecadora eres tú! Ves, Dios está correcto y tú estás equivocado.

Y tú estás tan fuerte y obstinadamente equivocado que es justo que Dios te castigue. Es correcto que Él te dé a la reprobación. Es correcto que Él te arroje al Infierno para siempre.

I. Primero, Dios está correcto y tú estás equivocado.

“Él es la Roca, cuya obra es perfecta, Porque todos sus caminos son rectitud; Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en él; Es justo y recto” (Deuteronomio 32:4).

Tú estás interesado en ti mismo. Quieres una vida fácil. Quieres una vida con el menor sufrimiento posible. No quieres ser Cristiano. Un Cristiano tiene que negarse a sí mismo. Un Cristiano tiene que soportar el dolor. Quieres placer, no dolor.

Una mujer en nuestra iglesia que fue recientemente convertida se dio cuenta de que era egoísta. Se dio cuenta de que siempre había sido egoísta. Ella dijo: “Pensaba en mí misma y en mi propia vida, nadie tenía que enseñarme a pecar aun cuando yo era pequeña. Yo ya era egocéntrica. [Ya era] pecaminosa porque nací en pecado. [Yo] crecí y comencé a pecar más y más audazmente sin sentir mucha culpa”. Esta mujer nació siendo egoísta. Nació cuidando sólo de sí misma, y cuando creció se volvió cada vez más interesada en sí misma. No se detuvo a notar que era su propia tendencia natural de ponerse primero, hasta que el Espíritu Santo abrió sus ojos a la verdad. Entonces ella podría ser honesta sobre sí misma y su condición. Entonces ella pudo saber que Dios estaba correcto, y ella estaba equivocada.

No eres honesto contigo mismo. No eres como la mujer que se dio cuenta de lo egoísta y pecadora que era. No piensas eso de ti mismo en absoluto. En vez, te consideras una víctima. Tu tema favorito es cada evento negativo y doloroso que te haya ocurrido. Recuerdas el tiempo que tu madre te hizo mal. Ensayas lo malo que tu padre fue contigo. Vuelves a algo terrible que te sucedió una y otra vez para justificar tu condición espiritual. Culpas a otros de cómo te trataron por ser como eres. En lugar de dejar esos recuerdos dolorosos fuera de tu mente, los estimas. Esos recuerdos son tu excusa para tu estancamiento espiritual y personal. No tomas la propiedad personal de tu situación.

Eres como Adán, que una vez que había comido el fruto prohibido, comenzó a culpar a Eva por su pecado. Eres como Eva, que una vez fue enfrentada a su pecado de comer el fruto prohibido, culpó a la serpiente. Sin duda, Satanás tenía una buena razón para su pecado también. Siempre hay alguien a quien culpar, alguna excusa, alguna buena explicación de por qué eres como eres. Pero, ¿qué vas a hacer al respecto? Acepta la responsabilidad por ti mismo – por tu alma – sin importar quién más tenga algo que ver con ella. Me oíste predicar un sermón llamado “¡Gracias a Dios por Nuestro Pastor! Te conté cómo Dr. Hymers tuvo que superar grandes dificultades para lograr el gran éxito que ha tenido. Por cada cosa terrible que te ha sucedido, él ha experimentado cinco cosas peores, negativas, más intensas. Se honesto contigo mismo. Admite que eres culpable por la forma en que eres. La Biblia dice: “El reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan” (Mateo 11:12).

Dios está correcto y tú estás equivocado. En el Último Juicio, Dios te hará responsable de tu propia vida. Dios no se equivocará al hacer esto. Dios tendrá razón al hacer esto. Acepta la culpa por tu vida y por tu pecado.

Otra mujer que fue convertida recientemente en nuestra iglesia contó cómo estaba atrapada en una condición perdida porque había estado buscando un sentimiento, en lugar de Jesús. La mujer dijo: “Durante mucho tiempo, seguí tratando de buscar un sentimiento para probar mi salvación. [Incluso] aunque Dr. Hymers y Dr. Cagan me dijeron una y otra vez – que no buscara un sentimiento...Yo no podía salir de ese círculo tratando de buscar por un sentimiento”. Esta mujer insistía en su propio corazón que ella estaba correcta, y que Dr. Hymers, Dr. Cagan, y Dios estaban equivocados. Ella no creía que podía ser salva por fe en Jesús. Ella creía que tenía que ser salva por un “sentimiento” en Jesús.

La Biblia dice: “Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo” (Romanos 5:1). Pero esta mujer no creía eso. Tú no crees eso. Tú no crees en la Biblia cuando te dice que la fe en Jesús es tu salvación. Tu confíanza está en tus sentidos. Crees sólo en lo que puedes sentir. Porque no puedes cerrar los ojos y sentir a Jesús, no confiarás en Él. Estás equivocado. Dios está correcto. Dios dice que la salvación es a través de la fe en Jesús. Debes seguir confiando en tus sentidos y sentimientos hasta que te quemes en los fuegos del Infierno, o debes admitir que estás equivocado, que Dios está correcto y confiar en Jesús por fe y sin sentimiento.

Es imposible que un pecador sea convencido – Dios está correcto y tú estás equivocado. Sólo por la gracia de Dios y la obra del Espíritu Santo puede un pecador hacer eso. Yo luché con Dios muchas noches sin dormir. Hice todo lo posible para sacar a Dios y mi pecado de mi mente, porque sabía que Dios estaba correcto. Sabía que Dios estaba correcto, y yo estaba equivocado, pero no quería admitirlo. Quería continuar como si yo estuviera en lo correcto. La realidad de que estaba equivocado siguió golpeando en las ventanas de mi alma. Cuanto más trataba de ignorarlo, más evidentes eran las evasiones. Dios iba a tener mi atención.

Esa experiencia fue muy dolorosa. Pero estoy tan agradecido de que Dios me mostró lo equivocado que estaba en mi pecado. Tú no quieres admitir que estás equivocado. Así que tendrás que estar convencido de que estás equivocado. Tendrás que darte cuenta de que todo lo que has hecho está mal. Tendrás que darte cuenta de que incluso la persona que eres, está mal. Tienes que estar convencido de que Dios está correcto, y tú estás equivocado.

“Él es la Roca, cuya obra es perfecta, Porque todos sus caminos son rectitud; Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en él; Es justo y recto” (Deuteronomio 32:4).

II. Segundo, es correcto que Dios te abandone a la reprobación.

El Dr. Henry C. Thiessen dijo:

El endurecimiento final es el pecado contra el Espíritu Santo y es imperdonable, porque el alma...ha dejado de ser receptiva de la influencia divina (traducción de H. C. Thiessen, Introductory Lectures in Systematic Theology, Grand Rapids: Eerdmans, 1949, p. 270).

La Biblia dice:

“No sea que haya algún fornicario, o profano, como Esaú, que por una sola comida vendió su primogenitura. Porque ya sabéis que aun después, deseando heredar la bendición, fue desechado, y no hubo oportunidad para el arrepentimiento, aunque la procuró con lágrimas” (Hebreos 12:16-17).

¡Esaú trató de arrepentirse, pero ya era demasiado tarde! Él permanece para siempre como un ejemplo de un hombre que esperó demasiado tiempo para ser salvo. Él cometió el pecado imperdonable.

¿Era correcto que Dios abandonara a Esaú a la reprobación? Sí – ¡Dios estuvo correcto al abandonar a Esaú! Dios es un “Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en él; Es justo y recto” (Deuteronomio 32:4). Dios está correcto y tú estás equivocado.

III. Tercero, es correcto que Dios te lance al Infierno.

La Biblia dice:

“Pero los cobardes e incrédulos…y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre” (Apocalipsis 21:8).

“Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego” (Apocalipsis 20:15).

“Y al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes” (Mateo 25:30).

¿Será correcto que Dios te lance al Infierno? ¡Sí lo será! Él es un “Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en él; Es justo y recto” (Deuteronomio 32:4). “Lejos esté de Dios la impiedad” (Job 34:10). “Y que en él no hay injusticia” (Salmo 92:15). Es correcto que Dios te envíe al Infierno. ¿Por qué?

(1)  No pensaste seriamente en Jesús. No lo buscaste.

(2)  No pensaste en tus pecados ni en cómo remover tus pecados del registro de Dios.

(3)  Pensaste poco acerca de la muerte de Jesús en la Cruz para pagar tus pecados y lavarlos con Su Sangre.

(4)  Argumentaste en tu mente cuando escuchaste este sermón. En realidad estabas argumentando con Dios – quien reveló cada una de estas verdades en la Biblia.

(5)  Cometiste muchos pecados que no querrías que nadie supiera. ¡Pero Dios sabe de ellos!


Sí – ciertamente mereces estar en el Infierno. ¡Dios está correcto y tú estás equivocado! Es correcto, es justo, que Dios te envíe a las llamas.

Has descuidado la gran salvación que Dios ofrece, y la Biblia dice:

“¿Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande?” (Hebreos 2:3).

¡Dios está correcto y tú estás equivocado!

Jesús murió en la Cruz para hacer un pago completo por tus pecados. Pasó por el Infierno en la Cruz para que no tengas que ir al Infierno en la eternidad. “Su sangre expía por toda nuestra raza, y rocía ahora el trono de gracia”, dijo Charles Wesley. ¡Y tenía razón!

Pero debes admitir que Dios es recto, correcto y justo – y tú debes admitir que eres un pecador en profunda rebelión contra Dios. También debes admitir que Dios está correcto y tú estás completamente equivocado. Entonces, debes confiar en Jesús. Dios no envió a Jesús a condenarte. Envió a Su Hijo para que tú seas “salvo por él” (Juan 3:17).

Jesús no se quedó en esa Cruz. Él se levantó, en un cuerpo de carne y hueso, en la primera Pascua. El ángel dijo:

“No está aquí, pues ha resucitado” (Mateo 28:6).

Y hoy Jesucristo está vivo físicamente, en el Cielo, en otra dimensión, sentado a la diestra de Dios el Padre (Marcos 16:19, Hebreos 10:12, etc.).

Quiero que mires a Jesús por fe esta mañana. Da la espalda a tu vida de pecado y confía en Jesús. ¡Él te salvará! ¡Él te salvará! ¡El te salvará ahora!

Porque Él te ama, Jesús limpiará tus pecados con Su Sangre – y Él lo hará ahora – ¡de una vez y para siempre! Dr. Hymers, por favor venga y cierre este servicio.


CUANDO LE ESCRIBAS A DR. HYMERS DEBES DECIRLE DE QUE PAÍS LE ESTÁS ESCRIBIENDO O ÉL NO PODRÁ CONTESTAR TU CORREO. Si estos sermones te bendicen por favor envía un correo electrónico a Dr. Hymers y díselo pero siempre incluye de qué país estás escribiendo. El correo electrónico de Dr. Hymers es rlhymersjr@sbcglobal.net (oprime aquí). Puedes escribirle a Dr. Hymers en cualquier idioma, pero escribe en Inglés si es posible. Si deseas escribirle a Dr. Hymers por correo postal, su dirección es P.O. Box 15308, Los Angeles, CA 90015. Puedes llamarle por teléfono al (818) 352-0452.

(FIN DEL SERMÓN)
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La Escritura Leída Antes del Sermón por el Sr. Noah Song: Apocalipsis 20:12-15.
El Solo Cantado Antes del Sermón por el Sr. Benjamin Kincaid Griffith:
“If You Linger Too Long” (por Dr. John R. Rice, 1895-1980).


EL BOSQUEJO DE

DIOS ESTÁ CORRECTO Y TÚ ESTÁS EQUIVOCADO

por el Sr. John Samuel Cagan

“Él es la Roca, cuya obra es perfecta, Porque todos sus caminos son rectitud; Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en él; Es justo y recto” (Deuteronomio 32:4).

(Salmo 92:15; Génesis 18:25)

I.   Primero, Dios está correcto y tú estás equivocado, Mateo 11:12;
Romanos 5:1.

II.  Segundo, es correcto que Dios te abandone a la reprobación,
Hebreos 12:16-17.

III. Tercero, es correcto que Dios te lance al Infierno, Apocalipsis 21:8;
Apocalipsis 20:15; Mateo 25:30; Job 34:10; Salmo 92:15;
Hebreos 2:3; Juan 3:17; Mateo 28:6; cf. Marcos 16:19;
cf. Hebreos 10:12.